22 de octubre de 2012

Besaste a tu amigo y a tu amiga mientras yo estaba en mi cama pensando en ti y deseando tenerte cerca, deseando tus caricias, tus besos... Estabas muy ebria, lo sé, pero antes me llamabas, me decías cuanto habías bebido, fumado, webiado y cuanto me amabas. ¿Por qué no pudo ser así? ¿no te acordaste de mi ni un momento en tu sopor etílico? Debí terminarlo todo, es la segunda vez que sucede, no es un simple Déjà vu. Cuando intentabas decirlo y tu voz quebrada hablaba por ti, sólo pude bromear, estaba tan nerviosa como tu. Se suponía que tenía que terminarlo, terminarnos. No pude. Me cuesta entender estas cosas cuando suceden y no las logro aceptar, pero ahora, contigo, me anulé. No quiero perderte, quiero olvidar que pasó, quiero olvidar que me molesta, que me dolió, que aun duele, que está dando vueltas en mi cabeza y que me da rabia! y que me da rabia no gritarte y decirte que te odio, que por qué eres tan weona! Pero es que no te odio y sería weón de mi parte fingir que creo que eres weona. Me siento mal porque me defraudas, me siento mal porque me doy cuenta que te amo demasiado, hasta que duele y mi orgullo siente celos de ti, de tu ternura, de lo hermosa que eres, de lo hermosa que me haces sentir, de lo hermosas que son las weas que haces y que yo hermosamente dejo pasar dos hermosas veces. ¿Por qué chuchacresta me siento tan weona al perdonarte si quiero hacerlo?